El agro empuja, el empleo se frena
Aunque la industria metalúrgica muestra signos de recuperación en algunos sectores y regiones, el informe de mayo evidencia una actividad fragmentada, con empleo estancado, expectativas moderadas y fuerte presión importadora.
AGRO
GloCal


Mayo cerró con una suba interanual del 1,6% en la producción industrial metalúrgica, pero el dato viene acompañado de un retroceso mensual del -1,1%, lo que deja al sector con un crecimiento acumulado del 3,3% frente al mismo período de 2024. En paralelo, la utilización de la capacidad instalada subió 2,6 puntos porcentuales, aunque permanece en niveles históricamente bajos.
El empleo, por su parte, sigue sin recuperarse: registró una caída del -1,9% interanual y se mantuvo sin variaciones frente a abril. Las expectativas empresarias tampoco son alentadoras. El 60,5% de las firmas estima que la producción se mantendrá estable o caerá en los próximos tres meses. Solo un 16,9% anticipa reducción de personal, pero el clima de cautela domina la escena.
Los motores del crecimiento sectorial siguen siendo Maquinaria Agrícola (+14,1%) y Carrocerías y Remolques (+12,7%), aunque desaceleran respecto a meses previos. En el otro extremo, Fundición (-14,7%) y Autopartes (-2,3%) siguen acumulando caídas. El sector de Bienes de Capital volvió a terreno negativo (-2,1%) tras una breve estabilidad.
El análisis por cadenas de valor confirma la centralidad del agro: las empresas proveedoras del sector agropecuario lideran con un alza del 8,3%. También mejoran levemente los rubros vinculados a alimentos y bebidas, energía, construcción y consumo final. En cambio, la cadena automotriz volvió a caer (-0,9%) y el petróleo y gas retrocede con fuerza (-3,2%), afectado por cambios estratégicos de empresas como YPF y Pan American, y por una creciente ola importadora.
A nivel territorial, Córdoba (3,5%) y Santa Fe (3,8%) siguen por encima del promedio, gracias al dinamismo agroindustrial. Mendoza y Entre Ríos crecen con menor intensidad, y Buenos Aires apenas se mueve (0,5%).
En comercio exterior, abril trajo una buena noticia: las exportaciones metalúrgicas crecieron un 7,4%. Pero las importaciones subieron 29,4%, con récords en bienes de capital. La presión externa se consolida como un condicionante estructural.
El informe de ADIMRA de mayo vuelve a dejar claro que la reactivación no es homogénea. Hay brotes verdes, pero también rezagos estructurales y una macro volátil que aún no permite pensar en una recuperación sostenida. La industria metalúrgica camina, pero a paso desigual.