Florio: Fuerza, historia y futuro en cada pieza
Donde comienza el valor es un ciclo de entrevistas íntimas a las empresas que formaron parte de Marca de Origen. Historias con raíz en el sur cordobés que revelan cómo se construye identidad y futuro agregando valor desde el corazón productivo de la región.
INDUSTRIA
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Caminando entre historia y acero
Caminando por el taller Florio, entre piezas de motores listas para ser rectificadas y máquinas de gran porte operando con precisión, el puente grúa se desliza sobre nuestras cabezas. En ese instante, una pieza de un molino de varias toneladas comienza a elevarse hacia una de las máquinas principales. En medio de ese escenario mecánico y vivo, Ezequiel Podversic —actual presidente de la Cámara de Industriales Metalúrgicos y uno de los responsables de Marca de Origen— se detiene para conversar.
Su tono es calmo, su presencia firme pero accesible. A su lado, la historia toma forma con palabras y detalles. "La empresa arrancó en 1938 como un taller mecánico", cuenta, y se suma a la charla Alejandro Razzini, con quien hoy comparte la conducción de esta pyme. "Después se incorporó una rectificadora de motores y con los años se diversificó hacia servicios industriales".
Saben que tienen un legado entre manos. Conservan el nombre original, como homenaje a quien lo fundó. Y se aferran a los símbolos de continuidad como un acto de resistencia y responsabilidad: “Seguimos con el mismo número de teléfono, la misma cuenta bancaria. Esas cosas dicen mucho de cómo se gestiona una empresa con historia”, afirma Razzini.
¿Qué significa para ustedes agregar valor desde el sur cordobés?
Podversic no duda: “Significa que desde esta región, con trabajo, podemos aportar a industrias de todo tipo. En Río Cuarto trabajamos con piezas de gran porte, pero también damos soporte a empresas pequeñas, medianas y grandes. Algunas locales como Bio 4 o Biofarma, otras internacionales como Renault u Holcim. Lo importante es mostrar que acá hay capacidad, hay conocimiento, hay gente que sabe hacer”.
¿Qué impacto sienten que genera su empresa en la comunidad o en el sector donde trabajan?
"Hay un compromiso con la ciudad y con la industria", subraya Podversic mientras observa cómo sus operarios manipulan con precisión milimétrica estructuras de varias toneladas. “Generamos empleo calificado, formamos personas, compramos insumos a proveedores locales. Además, representamos a un sector que pelea por seguir de pie pese a los embates económicos. Y eso también es parte del impacto: sostener una industria nacional desde el interior”.
¿Cuál es el presente de la empresa y hacia dónde proyectan el futuro de la marca?
“La empresa tiene hoy dos grandes líneas de trabajo. Por un lado, la rectificación de motores, con un fuerte foco en motores grandes, donde tenemos una trayectoria consolidada. Por otro lado, la fabricación y reparación de piezas de gran porte para sectores como la minería, la industria naval, alimenticia y automotriz. Este tipo de trabajos no solo requieren infraestructura pesada, sino también un nivel de conocimiento técnico e ingeniería aplicada que muy pocas firmas tienen en el país. Eso nos convierte en un referente a nivel nacional”, explica Podversic.
“El desafío es sostener y proyectar ese diferencial. Estamos incorporando tecnología y capacitando continuamente a nuestros operarios para garantizar precisión, calidad y eficiencia en todo el proceso. Pero también queremos abrir nuevas líneas industriales. En ese camino, estamos acompañando el desarrollo de SEIERO, una firma con la que compartimos visión productiva y que busca avanzar sobre nuevos desarrollos, con otro ritmo y otra lógica, pero siempre desde el hacer”.