Robótica desde la primaria

Con un fuerte trabajo articulado entre industria, educación y territorio, la CIM, Fundación Mirgor y ADIMRA entregaron kits de robótica a la Escuela Jorge A. Newbery de Las Higueras, tras una formación docente que busca llevar la innovación tecnológica a las infancias.

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En la sede de la Cámara de Industriales Metalúrgicos de Río Cuarto (CIM) se llevó adelante un desayuno de trabajo que puso en el centro de la escena a la educación, la innovación y el compromiso territorial. Junto a la Fundación Mirgor y ADIMRA, la cámara concretó la entrega de diez kits de robótica y una caja completa de herramientas a la Escuela Primaria Jorge A. Newbery de Las Higueras, como cierre de un proceso de formación online en programación y robótica destinado a docentes.

Del encuentro participaron la inspectora de la Zona 4120, Marta Muñoz; el inspector de Educación General de Primaria, Horacio Madini; la directora del establecimiento, Lic. Sandra Guzmán; y las docentes Noelia Rama y Lorena Oviedo, quienes completaron la capacitación. La reunión permitió compartir la experiencia transitada, reflexionar sobre los desafíos de la educación pública en tiempos de transformación tecnológica y proyectar nuevas acciones de articulación.

Durante el intercambio se destacó especialmente la importancia de la formación docente continua, la necesidad de fortalecer la articulación entre niveles educativos y las dificultades que aún persisten en relación a la conectividad en las escuelas públicas, condición imprescindible para que las tecnologías puedan convertirse en verdaderas herramientas pedagógicas.

Las docentes expresaron con claridad el impacto del proceso formativo:
“Estamos muy motivadas y queremos seguir formándonos para llevar estas tecnologías a las infancias por medio de proyectos”, señalaron, destacando el valor de poder traducir la capacitación en propuestas concretas dentro del aula.

Los kits entregados —asociados al Programa de Formación en Mecatrónica para Escuelas Primarias de la Fundación Mirgor— incluyen placas Arduino, sensores, motores, módulos de comunicación, protoboards, instrumentos de precisión y una amplia variedad de componentes electrónicos, pensados para que niñas y niños puedan iniciarse tempranamente en la robótica, la programación y el pensamiento computacional.

Desde la Cámara Metalúrgica, se subrayó que estas iniciativas no son hechos aislados, sino parte de una estrategia más amplia de vinculación entre el sector productivo y el sistema educativo. En ese sentido, Podversic remarcó:
“Vemos que los jóvenes quieren estudiar y trabajar, que los docentes se enfrentan permanentemente sin recursos a la innovación y logran formarse y mejorar. Es importante que todos estos esfuerzos puedan ser conducidos y coordinados para un mayor impacto social, desde los más chicos en adelante”.

La experiencia de Las Higueras vuelve a poner sobre la mesa un tema clave: la educación tecnológica temprana como política de desarrollo. Cuando el Estado, la industria y la escuela se sientan a la misma mesa, el futuro deja de ser una promesa abstracta y empieza a tomar forma en proyectos concretos, desde el aula y para toda la comunidad.